Los pelos de la barba son gruesos y tienen más fuerza que los del cuero cabelludo, por eso al afeitarlos las puntas al crecer quedan vivas y eso pincha.

La sequedad que experimentaremos si no tratamos nuestra barba produce picores más la posible suciedad que vas a atesorar entre sus pelos.

Cuando comemos, bebemos o incluso simplemente por la contaminación o la piel muerta, nuestra barba va acumulando partículas. Si todo esto no se limpia correctamente, pude dar lugar a irritaciones.

Lo importante después de un buen corte de pelo es saberlo mantener. Para ello son necesarias unas pequeñas pautas que nos harán mantenerlo bien cuidado durante más tiempo:

Escoger correctamente el champú y acondicionador, todos los cabellos no son iguales ni tienen las mismas necesidades, si tienes un cabello seco, graso, grueso, fino, o si tienes tendencia a la caída deberás de consultar cual es el más adecuado para tu tipo de cabello.

No tiene por qué ser así, ya que la barba por sí misma no produce calor. Más bien nos produce una especie de efecto aislante que nos protege la cara tanto del frío y la humedad como del calor y los rayos de sol.

Un estudio realizado en Australia, de la Universidad de Southern Queensland llegaron a la conclusión de que al final nuestra barba estaría trabajando como un protector solar natural lo que reduce entre un 50-95 % los rayos ultravioletas que llegan a nuestra piel de la cara cubierta por la barba, eso si estos porcentajes variarán dependiendo del grosor de nuestra barba y el ángulo en el que incide la luz solar.

Cortarse el pelo o afeitarse ha existido desde siempre, pero fue en Egipto cuando realmente empezó de manera profesional a considerarse un barbero.

Se conoce que entre los antiguos egipcios, los barberos eran personas distinguidas y respetadas. En la tumba Nº 45, en el Bajo Cementerio de Tebas, se halló una estatuilla de 46 cm. de alto,  de cerca de 3.300 años de antigüedad.

Continuando después de los mejores bigotes, lo que falta es una buena barba y si hablamos de barbas estas son las mejores y mas significativas que encontramos.

Chuk norris

El hombre de Barba tupida y rubia ,siempre en su medida justa porque solo crece hasta donde Chuck quiere, le da ese aspecto de hombre duro y de gran héroe Americano que puede acabar con toda una guerrilla el solo.

CHARLES CHAPLIN

Este tipo de bigote ha sido famoso a lo largo de la historia no solo por Charles Chaplin sino que también Adolf Hitler, que usaba uno parecido, aunque fue el actor quien lo puso de moda. También conocido como “toothbrush” este bigote pequeño y grueso lo utilizo para dar un aspecto más cómico, aunque decía que a él personalmente no le gustaba llevar bigote, gajes del oficio.

Nuestro personaje favorito de las navidades en realidad no intervino en las fiestas navideñas hasta hace relativamente poco tiempo.

La imagen de Santa Claus tiene sin duda mucho carisma un hombre amable regordete y con su gran bolsa de regalos con el que todos los niños del mundo sueñan, que llegara con su trineo tirado por renos voladores aunque por esas fechas en su ciudad estén a 40º en algunos hemisferios, no importa el entrara por la chimenea y dejara los regalos bajo el árbol.

1. Es invierno y hace frío

Simplemente por comodidad deberías dejártela. Y no hay estación mejor que el invierno para empezar: no sudas, no te pica, no molesta, es más, abriga. Todo ventajas

Las típicas preguntas que todos nos hacemos ¿Es bueno lavarlo a diario? ¿Debo usar mascarilla hidratante? Y todo ese tipo de cuestiones.

El cabello de hombre y mujer son diferentes
Es una cuestión genética. Las hormonas como los andrógenos, entre los que están la testosterona y la dihidrotestosterona, ya que los niveles de testosterona son diferentes en hombres y mujeres, la manera en que crece y se distribuye el pelo también es distinta.

Uno de los peinados que no parece muy práctico para jugar al fútbol es el que utiliza Fellaini el jugador del Manchester United lleva años usando un Afro al que ahora además le ha sumado una decoloración para hacer todavía menos discreto su peinado, algo al alcance de los más atrevidos.