No tiene por qué ser así, ya que la barba por sí misma no produce calor. Más bien nos produce una especie de efecto aislante que nos protege la cara tanto del frío y la humedad como del calor y los rayos de sol.
Un estudio realizado en Australia, de la Universidad de Southern Queensland llegaron a la conclusión de que al final nuestra barba estaría trabajando como un protector solar natural lo que reduce entre un 50-95 % los rayos ultravioletas que llegan a nuestra piel de la cara cubierta por la barba, eso si estos porcentajes variarán dependiendo del grosor de nuestra barba y el ángulo en el que incide la luz solar.
Además, si tenéis una barba frondosa se mantiene húmeda durante un rato cuando la mojamos. Esto hace que podamos sentir fresquito durante más tiempo en nuestra cara después de unos baños y refrescarnos, igual que hacemos cuando nos mojamos el pelo de la cabeza.
Pero si a pesar de esto en verano te molesta la barba puedes optar por aligerarla o recortarla un poco, si no quieres prescindir totalmente de ella. También el tenerla bien cuidada e hidratada nos ayudara a mantenerla más fresquita en verano usando un buen aceite para barba que no sea graso que contienen activos calmantes y regenerativos.
Al final afeitarse la barba o no depende de ti, si te apetece pero no lo hagas si no es así porque eso de que da calor es muy relativo.