Nuestro personaje favorito de las navidades en realidad no intervino en las fiestas navideñas hasta hace relativamente poco tiempo.
La imagen de Santa Claus tiene sin duda mucho carisma un hombre amable regordete y con su gran bolsa de regalos con el que todos los niños del mundo sueñan, que llegara con su trineo tirado por renos voladores aunque por esas fechas en su ciudad estén a 40º en algunos hemisferios, no importa el entrara por la chimenea y dejara los regalos bajo el árbol.
Bien pero después de todo esto ¿Quien fue realmente este regordete de traje rojo y barba?
San Nicolas original era nativo de Lycia, un pueblo de la antigua Turquía (S. IV d. C.). Su nombre real era Nicolás de Bari en realidad era un sacerdote alto y delegado, aunque fueron conservados dos rasgos importantes de su personalidad: el amor por los niños y su gran generosidad.
Cuenta la leyenda, que Nicolás supo que uno de sus vecinos estaba muy mal económicamente y desesperado por no poseer la dote de su hija que estaba a punto de casarse. Al enterarse de esto, Nicolás entró sigiloso en la casa del vecino y deposito tres bolsas con monedas cerca de la chimenea a modo de milagroso obsequio. La boda se celebró como el padre de la joven deseaba, y desde entonces se comenzó a popularizar la costumbre de intercambiarse regalos para la navidad.
Hasta aquí la parte de la historia, a partir de eso el mercado, con unas buenas estrategias de marketing, hizo el resto. El aspecto que ahora tiene es debió al arte del caricaturista norteamericano Thomas Nast. De 1863 a 1886 el Santa Claus regordete, de mejillas coloradas, larga barba blanca y de aspecto risueño y simpático fue el centro de atracción de la revista Harper´s Weekly y de allí salto a las vidrieras de los grandes centros comerciales.
Ya sea Papa Noel, San Nicolas o Santa Claus este simpático hombre es la imagen de la navidad, unas fechas que esperamos durante todo el año para que este personaje entre en nuestras casas y nos deje algunos regalitos.
Regalitos como los que podéis conseguir con los puntos Ayalatin que obtendréis con cada corte de pelo.
Os esperamos