Primero tenemos que preparar la barba para el afeitado, un poco de agua tibia o una toalla caliente para abrir los poros y aplicar un aceite pre shave para pasar más suavemente la navaja y cortar más a ras el pelo.
A la hora de utilizar espumas de afeitado siempre será mejor utilizar una de barbería o jabones para afeitado que crean la espuma, lo malo de utilizar las espumas enlatadas de supermercados es que estas tienden a resecar la piel, así que mejor una más profesional para evitar esto.
Ya estamos preparados ahora es hora de tomárselo con calma tanto si utilizas navaja o maquinilla convencional, para empezar afeitaremos en el sentido en el que crece el pelo y después si queremos apurar más lo haremos en el sentido contrario evitando no presionar demasiado que puedan producirnos cortes o irritaciones innecesarias.
Bien ya casi estamos, ahora solo nos queda aplicar un after shave que nos refrescara la zona y además nos protegerá de las infecciones ya que la zona ahora está más sensible.
Con esto esperemos que hayas disfrutado de un buen afeitado, agradable y apurado como en aquellos años en los que el afeitado era toda una tradición de caballeros, casi tanto como en nuestra.
Si tienes curiosidad y quieren un afeitado profesional, pasa por nuestro sillón de la Peluquería en Rubi y prueba a dejarte llevar.